El acoso en la Ciudad de México no es tema nuevo, desde hace muchos años es algo que se ha dado, pero en la actualidad podría ser más evidente, gracias a toda la tecnología con la que contamos.
Aunque, ¿no creen que, con todos esos avances, también debería ser más sencillo encontrar una forma de frenarlo? Porque, hoy en día, lo difícil es que las autoridades crean en la palabra de alguien y eso sí que irrita.
Imagen 2
Pero también irrita que sean las mismas personas las que consideran que la persona acosada tiene la culpa, por provocar a los demás con la forma, en cómo se ve; simplemente volvemos a la mentalidad retrógrada, que no dejará a la sociedad mexicana salir del hoyo en el que está.
Cada persona, sea hombre o mujer, tiene derecho a vestir, creer y opinar como desee, sin que tengan que culparla por ello. Tan simple es como que, si dice no, ¡es no! y no hay de otra; cosa que quizá nunca se vea en este país.
Al final, no a todos incomoda; las autoridades deben hacer lo necesario, para que aquellos que no respetan a los demás, paguen por su inconsciencia y hostilidad, que tanto irrita.