Así como a la mayoría de los mexicanos nos cayó como balde de agua helada la llegada de Donald Trump a la presidencia, a otros tantos del mismo país del norte, y de otras partes del mundo, tampoco les ha encantado la idea de que el magnate sea quien vaya a dirigir dicha nación los próximos años.
Incluso personas de la farándula (cantantes, actores, músicos, etcétera), han expresado a través de sus redes sociales, que no sienten ningún tipo de empatía con el copetudo (no, no hablamos de Peña Nieto). Pero así como hay oponentes, existen muchos otros que lo apoyan, ya sea por amistad, resignación o verdadera afinidad.
Pero la cosa no termina ahí, porque si bien cualquiera es libre de expresar su opinión, respecto a un tema, siempre habrá alguien que haga un escándalo por ello, y para eso los famosos son expertos y se pintan solos.
Resulta que las cantantes Rihanna y Azealia Banks, protagonizaron una pelea política, simplemente por intolerancia; la primera llamó cerdo inmoral a Trump y eso originó una serie de indirectas entre ambas, terminando en una discusión política, con tintes personales.
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Irrita que haya personas que tratan de callar a los demás; irrita que solo porque están en contra de lo que ellos consideran correcto, se sientan con el derecho de criticar y hasta insultar; irrita que quieran llamar la atención de tal forma (casi casi como las ladies y lords).
¡Vivan y dejen vivir! Es una lástima que haya gente que esté de acuerdo con la vil mentalidad de Donald Trump, pero allá ellos, cuando de verdad se den cuenta que las políticas que está implementando, solo terminarán jodiendo a su país (bueno, y a otros). Nada justifica la intolerancia, en cualquier ámbito, no lo olviden.