El principal objetivo de la televisión, hoy en día y desde que se creó, es entretener y lo ha logrado casi en un 100%, la controversia viene al analizar el contenido con que la sociedad mexicana se está entreteniendo y que acapara la mayor parte de su tiempo de ocio; terminó hasta por ser un modelo a seguir o ejemplo de algunas personas.
Según una encuesta realizada por El Colegio de México y Berumen, un tercio de la población de jóvenes, entre 18 y 29 años, ven telenovelas con mayor frecuencia, ¡pero eso hace tres años! Ahora imagínense cuál será la cifra actualmente, y nos es por menospreciar a los mexicanos, sólo que a veces prefieren alimentar su cerebro con la basura que las dos televisoras predominantes del país ofrecen, solo para “entretener”.
Y es que es muy poco el porcentaje que utiliza la televisión como medio de información o para fomentar su cultura (porque sí, sí hay programas culturales y sin necesidad de un servicio de paga); no decimos que utilizar el contenido televisivo para despejarse y entretenerse esté mal, la diferencia es lo que ven y en qué cantidad lo hacen.
Actualmente hay gran cantidad de contenidos, por eso no comprendemos por qué dedicar la mayor parte del tiempo que se pasan frente a una televisión, viendo telenovelas, ¿por qué los canales insisten en saturar su programación de melodramas con los que consideren se sientan identificados los televidentes?, que a final de cuentas siempre es la misma historia: una persona pobre consigue el éxito y se enamora, a pesar de vivir las peores desgracias, tratando quizá de fomentar la esperanza en la sociedad, de que algún día el destino compensará su mala fortuna (?).
Quizá sea esa la medicina para tener un pueblo dominado, entre las telenovelas y otros funestos espectáculos, que repetimos no está mal que vean, sino el tiempo que a ellos dedican y el tiempo que no dedican a informarse sobre la situación de su propia ciudad, siquiera.
Irrita que la sociedad mexicana sea tan fácil de enajenar, irrita que no basta con ver todo el tiempo telenovelas, hasta ese debe ser el tema de conversación en reuniones; irrita que no sean capaces de ver su realidad más allá de un guión escueto y repetitivo, como lo es una telenovela.
¿Ustedes ven telenovelas o tienen retirada esa venda de los ojos?