El aumento de la gasolina en México es como el “cuento de nunca acabar”, cada año se va incrementando, y no importa quién prometa que no sucederá: sucede; pero, ¿por qué seguimos permitiendo esto, por qué el gobierno no hace nada para frenar el aumento, por qué debemos (y seguimos haciéndolo) pagar una gasolina tan cara?
Para el 2018, la gasolina Magna y Premium incrementarán su costo hasta 20 y 23 pesos respectivamente, es decir, 22.17% y 25.88% en promedio, respecto al precio actual, que corresponde a 16.27 y 18.27 pesos por litro, esto de acuerdo con la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas).
Y el problema no es tener que pagar más por el combustible, el verdadero problema es que eso originará el aumento de precios en varios productos, principalmente los de la canasta básica, que son los que más necesitamos, entonces no se trata de solo aumentar el precio de la gasolina, sino prácticamente de todo lo que consumimos.
A partir del próximo año, el combustible tendrá cotización libre en el mercado, que dependerá de estándares y precios internacionales, entonces es donde siempre entra la misma pregunta de toda la vida: ¿por qué México siendo un país petrolero debe dar a su población la gasolina a un alto costo?
Lo peor es que siempre tratan de justificarse, equiparando costos con otras naciones donde es más cara, como el transporte público y otros servicios, pero qué curioso que siempre se les olvide comparar los ingresos promedio de cada habitante y el salario mínimo establecido en cada país; sí, los costos son menores que en otros lugares, así como el salario es mucho menor también.
Es verdaderamente irritante que siempre nos quieran ver la cara de estúpidos, irrita que les importe poco que nos alcance para apenas sobrevivir, y aún así hagan sus aumentos; es irritante que solo busquen el beneficio propio, ya que ni siquiera es algo que ayude a la economía del país, para que éste crezca a nivel nacional e internacional.
Los Irritantes 