La homofobia sigue permeando el pensamiento de algunos mexicanos y aunque la OMS eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales hace 29 años, en algunos sectores de la población prexiste la estigmatización y la discriminación.
“De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre Discriminación (ENADIS) 2017, el 33% de mujeres y 41% de hombres no aceptarían a alguien trans en su casa; mientras que el 30% de mujeres y el 35% de hombres no aceptarían a alguien homosexual”.
Como podemos observar hay más intolerancia en el sector masculino, pero la discriminación se refleja en muchos aspectos, principalmente con la intolerancia marcada en el trabajo, en la falta de justicia, en oportunidades laborales, en la estigmatización de familia y en espacios sociales.

En consecuencia, “7 de cada 10 personas LGBTTTI expresaron haber vivido y sufrido discriminación”. Pero lamentablemente la falta de justicia hace que los delitos queden como quejas sin resolver por parte de las autoridades.
Podemos ver en medios y redes sociales el aumento de transfeminicidios, sin que las autoridades den soluciones a las muertes, se conoce que “de 2007 a 2017 se han registrado 422 transfeminicidios, según el Centro de Apoyo a las Identidades Trans”. Entonces las personas lesbianas, gay, bisexuales y trans tienen que «acostumbrase» a ser víctimas de delitos, violencia y discriminación, por el pésimo sistema judicial y nulo acceso a la justicia, por un gobierno que se preocupa más en crear refinerías, aeropuertos y trenes, que por brindar una vida libre de violencia.

@Losirritantes