Con la última contingencia ambiental en la Ciudad de México, todo mundo resultó preocupado por la ecología y la destrucción del planeta. Eso, aunque la realidad es que hace tiempo este país ya está en emergencia por la contaminación, la deforestación, la falta de agua y la destrucción de las áreas naturales.
Adiós a los arbolitos
México pierde más de 250 mil hectáreas de bosque cada año, una cifra alarmante que no se ha podido parar por la tala clandestina y el crecimiento de la mancha urbana que va comiéndose las áreas naturales protegidas.
Se calcula que en el país se talan más de 500 mil árboles al día y estamos entre los primeros lugares de deforestación a nivel mundial.
Ante tan trágicas cifras, ¿qué estaremos respirando?
Menos de 100 días limpios al año
La CDMX, una de las más pobladas y contaminadas del mundo, vive cada vez más en medio del humo gris y las partículas tóxicas. Actualmente, de 365 días del año, menos de 100 son catalogados como “días limpios” o con los índices de contaminación a la baja.
Los chilangos han desarrollado una especie de inmunidad evolutiva a la nata gris que a diario se meten a los pulmones.
Mexicanos son marranos
La producción de residuos en México está en la era de piedra. Mientras otros países van en camino hacia la cero producción de residuos y la desaparición del concepto de “basura”, aquí se producen 103 mil toneladas diarias, de las cuales mucho poco se recicla y la mayoría acaba en tiraderos a cielo abierto.
México es el primer productor de basura en América Latina, ¡1.16kg por persona cada día y sin temor a la peste!.
Tirando el agua sin miedo y sin vergüenza
En este país se consumen 190 litros de agua por persona, cada día, de los cuales se calcula que la mitad son literalmente desperdiciados, se van por la cañería sin siquiera haber servido para algo.
Al mismo tiempo, casi el 10% de la población a nivel nacional no tiene acceso al agua potable ni siquiera para las necesidades mínimas del día a día.